William Montgomery Watt (1909-2006), en su libro El Islam y el cristianismo en el mundo actual, escribió: “El Corán no pudo ser escrito por Muhammad bajo ninguna circunstancia, ni es el extracto de su pensamiento… es la Palabra de Al-lah, la cual le reveló a Muhammad, para que la transmitiera a sus contemporáneos y a la gente que vino después de ellos. Por lo tanto, Muhammad no es más que un profeta y mensajero que fue enviado a los árabes de la Meca en primera instancia y a todos los árabes de forma general, ya que el Corán fue revelado en idioma árabe puro. Sin embargo, en su contenido se afirma que el mensaje es universal, que es para toda la humanidad, lo que se comprobó con la extensión del Islam a todos los rincones del mundo, siendo aceptado como religión y creencia por gentes de todas las razas”.