¿Aceptas el desafío?
En el Corán se encuentra el reto que se hizo a los árabes de producir una obra igual o superior. Los árabes, en la época en la que se reveló el Corán, eran muy hábiles en la lengua, en especial la retórica, la oratoria y la poesía.
Luego, se lanzó un segundo desafío, después de que no pudieron con el primero, y fue más sencillo, dijo Al-lah: {¿O acaso dicen que (Muhammad) se ha inventad (el Corán)? Diles (¡oh, Muhammad!): “¡Produzcan diez suras similares y convoquen a quienes puedan fuera de Al-lah (para que les ayuden), si son veraces!”} [Corán 11:13].
Nuevamente, no fueron capaces, por lo que se les lanzó un nuevo reto, mucho más fácil que el anterior: {Y, si tienen dudas sobre lo que hemos revelado a Nuestro siervo (Muhammad), produzcan un sura similar en algo a este y llamen a quienes adoran en lugar de Al-lah (para que los ayuden), si es verdad lo que dicen} [Corán 2:23].
Hay un sura, Al Kawzar, el 108, que apenas tiene diez palabras. Así que este desafío los reta a que produzcan un capítulo así de pequeño.